Ginestra por Robert Cervera



Serrat y su risa - la de Nacho. Esas son las dos cosas que me vienen a la memoria de cuando hice equipo con él en El Sindicato (luego Arnold), allá por los dosmiles. Con Serrat, Nacho ganó: me convirtió en un converso a su música, hasta el día de hoy. Y luego estaba su risa.
            La risa como señal de aceptación, de dejar que una noción entre en tu mente, le haga cosquillas y te dé una nueva perspectiva. Estar abierto, saber discernir el valor no siempre aparente que tiene algo y luego ponerlo en juego en lo que haces, con gusto y con idiosincracia, como Nacho siempre hacía, como si fuera lo más fácil del mundo. 


“Como si fuera lo más fácil del mundo.”

Nacho Ginestra — 18.02.23