Ginestra por Pita Gan



Nunca se me olvidará cuando, paseando por el Retiro y ya de baja y sufriendo los estragos de su maldita enfermedad, Nacho me contaba que estaba convencido de que iba a volver a currar y de que entonces iba a hacerlo todavía mejor. Lo decía con esa luminosidad un poco ingenua, a veces disparatada pero siempre maravillosa, que le caracterizaba. La misma ingenuidad por la que no era del todo consciente de la cantidad de respeto y de admiración que despertó siempre -que todavía despierta- entre quienes le quisimos tanto.
            Lo de volver al curro no pudo ser, pero da la medida del carácter de Nacho y de su forma de afrontar la vida y el trabajo. Así era Nachín; alguien que, con todo en contra, seguía insistiendo en que el plan era hacerlo siempre mejor y mejor. Alguien que, con ese afán, nos hizo mejores a todos. 


“Nos hizo mejores a todos.”

Nacho Ginestra — 18.02.23